Lesiones Traumáticas
Leer más
¿Sufres dolor, rigidez o deformidad en las manos? En nuestra clínica en Albacete, ofrecemos tratamientos especializados para diversas afecciones de la mano, como la artritis reumatoide, la enfermedad de Dupuytren y las lesiones de muñeca. Con técnicas quirúrgicas mínimamente invasivas como la artroscopia, podemos aliviar tus síntomas y mejorar tu calidad de vida.
Solicitar una citaLa artritis reumatoide se trata de una enfermedad autoinmune que puede llevar a destrucción articular y desalineación de los dedos, causando dolor, pérdida de función y una característica desviación cubital. También afecta a los huesos de la muñeca y a las partes blandas y tendones. Puede generar roturas tendinosas y aparición de tumoraciones llamadas pannus.
El diagnóstico de la mano reumática se basa en la evaluación clínica, radiografías para detectar daños articulares, y análisis de sangre que revelan marcadores inflamatorios y autoinmunes característicos de la artritis reumatoide.
La cirugía es necesaria cuando hay dolor intenso o pérdida funcional severa. Si los pacientes mantienen buena función y están libres de dolor, incluso con deformidades avanzadas, la cirugía no es prioritaria.
Depende principalmente de lo avanzado que esté el proceso en la mano del paciente. Puede variar desde una sinovectomía, reconstrucción y realineación de las articulaciones, hasta necesidad de colocación de prótesis o artrodesis. La elección depende del grado de deformidad y daño articular.
La cirugía busca aliviar el dolor y mejorar la función de la mano. En general, se obtiene una reducción significativa del dolor y mejor alineación de los dedos, permitiendo al paciente retomar sus actividades cotidianas.
La recuperación incluye rehabilitación y terapia física para recuperar movilidad y fuerza en la mano. Puede durar semanas o meses, dependiendo de la complejidad de la cirugía y la evolución del paciente. El tratamiento médico por parte de un reumatólogo es fundamental para un buen pronóstico de la enfermedad y evitar recidivas.
La artroscopia de muñeca es una técnica mínimamente invasiva que permite diagnosticar y tratar patologías dentro de la articulación de la muñeca mediante un artroscopio, una cámara con la que vemos el interior de la muñeca a través de una herida milimétrica, mejorando la visualización de los tejidos y facilitando intervenciones precisas.
El diagnóstico de una patología en la muñeca se realiza con estudios clínicos y de imagen, pero cuando estos no son concluyentes, la artroscopia diagnóstica permite observar directamente las estructuras internas de la muñeca y determinar la causa del dolor o la disfunción.
La artroscopia emplea pequeños portales en la muñeca, a través de los cuales se introduce una cámara y el instrumental quirúrgico. Se utilizan técnicas para la reparación de ligamentos, reducción de fracturas, gangliones, lesiones del fibrocartílago triangular, artrosis, entre otras.
La artroscopia de muñeca mejora notablemente el dolor y la funcionalidad, permitiendo una recuperación más rápida y con menos complicaciones que las cirugías abiertas.
La recuperación suele ser rápida, con inmovilización temporal y rehabilitación para recuperar la movilidad. Dependiendo del procedimiento realizado, los pacientes pueden retomar sus actividades normales en pocas semanas, siempre bajo supervisión médica.
La enfermedad de Dupuytren es una afección que provoca el engrosamiento y retracción del tejido bajo la piel de la palma de la mano, formando nódulos y cuerdas que limitan la movilidad de los dedos, llevándolos a una posición fija en flexión.
El diagnóstico se realiza mediante la observación clínica de nódulos o cuerdas en la palma y la incapacidad de extender completamente los dedos. Normalmente no se precisan pruebas de imagen.
La cirugía es recomendada cuando la contractura afecta la funcionalidad, generalmente cuando hay una flexión mayor a 30° en las articulaciones metacarpofalángicas (MCF) o de más de 15° en las interfalángicas proximales (IFP). Principalmente se mide cuando el paciente no puede apoyar la palma plana sobre una mesa.
La técnica de elección consiste en la fasciectomía limitada, es decir, una cirugía abierta donde se realiza la retirada completa de la cuerda. En otros casos también se puede realizar una técnica percutánea sin cicatrices, aunque esta tiene mayor posibilidad de recidiva.
El objetivo es mejorar la función de la mano, aliviando la contractura de los dedos. En la mayoría de los casos se logra una mejoría significativa en la extensión de los dedos y la capacidad de realizar actividades cotidianas.
En casos leves, simplemente tras la cura de la herida el paciente podrá hacer una vida normal. En casos más severos, puede ser precisa el uso de férulas y de rehabilitación para conseguir la movilidad completa del dedo.
Leer más
Leer más
Leer más
Leer más
Leer más
Leer más
Leer más
Leer más